Ha tenido que llegar un fin de semana otoñal de verdad por estas tierras (viento, lluvia, nubes, sol, ¿he dicho viento?) para que me lance a enseñar mi última aportación en el proyecto anual en el que nos embarcamos un grupito de alteradas y sus libros hace eso… un año. O para ser más exacta, algo más de un año.
Valeria ya hace tiempo que tiene en su casa su libro completo, que le mandé yo porque me tocó clausurarlo, pero yo aún no había enseñado por aquí mi aportación, que correspondía al mes de agosto y claro… ¿qué requisito vamos a tener en agosto? un Hello Summer como un camión de grande.
Yo reconozco que no sé exactamente cómo fue el verano de Valeria, pero ojalá fuera un verano de flecos y movimiento, de fruta y mar, de color y amor.

Un verano de baños y diversión, de felicidad y ritmo. Un verano justo a la medida de lo que ella necesitara.

Un verano de diversión y a la vez un verano de relax… ¿qué mejor combinación se le puede desear a una persona para un verano?
Así es el verano que he imaginado para Valeria, aunque ya haya pasado y ahora tengamos viento, lluvia, nubes, sol… ¿he dicho viento?

Qué decirte?
Que Valeria tiene mucha suerte de contar con una amiga con tu sentido de la estética y tu dedicación a la amistad.
Ha sido un proyecto largo y dificultoso en algunos momentos porque éramos muchas y no siempre es sencillo coordinarse. Pero aquí me tienes hablando de verano a finales de noviembre… y tan feliz de hacerlo.
Y yo pensando que andabas perdida, qué bien sienta leerte de nuevo. Suerte que tiene Valeria!!!😘
¿Cómo voy a irme yo lejos de ti? Que no me veas no significa que no esté. Solo tienes que buscar en los lugares apropiados.
Oooh, qué páginas tan bonitas y qué buena clausura para esta experiencia scrapera compartida. Parece mentira que ya haya pasado un año (y pico) desde que empezamos a descuartizar nuestros libros y ponerlos entre todas tan requetebonitos. Buen trabajo!
Buen trabajo compartido, que es el mejor trabajo. Qué rebonitos nos han quedado, nena.